La ciudad del Valle Argentino El 12 de agosto de 1882, en la zona del valle pampeano, se fundó General Acha. El lugar solía identificarse como "Quetré Huitrú Lauquen", (caldén solo junto a la laguna), tierra de viejos caldenes, uno de los cuales habría sido el "quetré huitrú" traducido como "caldén solo", o como "caldén cortado" o "desgajado". Dice el libro "Centenario de General Acha" que añosos y corpulentos caldenes cubrían, dueños y señores, todo el terreno elegido y demarcado para el nuevo pueblo. La planicie con marcado declive de Sud a Norte, a 223 metros sobre el nivel del mar, escondía, debajo de casi un metro de arena voladora, su superficie gredosa y toscosa. Al Sud del futuro pueblo, tendido de Este a Oeste y atalayado por una cadena de médanos, un valle de varias leguas, de tierra fértil, con varias lagunas y numerosas vertientes naturales, constituían la bella esperanza de los habitantes de la planta urbana, en formación. Clima seco, templado y sano, con bruscos cambios de temperatura. El viento Pampero', hoy casi desaparecido, castigaba feroz estas regiones. Fundación con cinco manzanas Ya existía Victorica y la calidad del agua del valle Quiñe Malal (un corral). Valle Argentino, motivó a Manuel Jorge Campos para fundar allí otro pueblo. General Acha configuró así una excepción a la característica sobre el origen de la mayoría de las localidades pampeanas, que tuvieron formas de vida antes de la fecha adoptada como fundación. En este caso, el campamento y el primer esbozo poblacional fueron el mismo día histórico. No hubo nada antes, todo a partir de entonces. En esa jornada, el general Campos reunió así mismo a jefes y soldados para hablar sobre la futura ciudad y su denominación y se propusieron dos nombres: Santa Carolina, por Carolina Plot de Campos, esposa del fundador, y General Acha, por Mariano Acha (1801-41), de vida militar intensa en las guerras civiles, muerto y decapitado a orillas del río Desagüadero. Se aprobó General Acha, ahora la tercera ciudad de la provincia en número de habitantes y que simboliza el enlace de la llanura pampeana con las tierras de más al Sur, "posta obligada" de viajeros, como escribe Fernando Aráoz. El agrimensor Joaquín Cascallar trazó la actual plaza Belgrano y las cuatro manzanas colindantes: al Norte, caballería; al Sur, infantería; al Oeste, comandancia y al Este, pobladores. También Manuel J. Campos (1847- 1908) tuvo actuación permanente en acciones militares de su siglo, y fue diputado nacional. Capital de La Pampa A la fundación y la cuestión de la capital se refiere la publicación centenaria, como antes lo habían hecho, por ejemplo, las revistas "La Moderna" y "Promoción Achense (Proa)", y después lo hizo "Platea 1". En 1884, una medida oficial estableció la capital en General Acha, pero otra de 1900 autorizó su traslado a Santa Rosa de Toay, aunque Acha retuvo el juzgado. En 1904 se determinó también trasladar el organismo judicial, antecedente que formó parte de un año convulsionado, en que no faltó una pueblada del vecindario achense, resuelto a no dejarse llevar el último reducto de su condición de capital. Es la recordada "Revolución de General Acha". Unos vecinos ocultaron documentación y otros, incluso venidos desde las quintas, enfrentaron a la policía, pero ésta recibió refuerzos y los rebeldes fueron detenidos, enviados a Santa Rosa y procesados por sustracción de documentos públicos, aunque finalmente, amnistiados. Municipio y otros organismos La municipalidad se creó en 1888 y su primer intendente fue Mariano Berón. En 1882 ya existió una oficina no correo, en tanto que a la actividad bancaria, oficialmente se la considera iniciada en 1909 con la creación de una sucursal del Banco Nación Arqentina Pero otras fuentes registran, que el banco se instaló en 1896 aunque sólo estuvo algunos años. La sucursal de 1909, seis años más tarde se redujo a "agencia dependiente de Santa Rosa", en 1919 volvió a sucursal y en 1922 tuvo su nuevo edificio. Entre las entidades del mismo tipo. también sobresale el Banco de La Pampa, habilitado en 1963. Desde los primeros tiempos, la ciudad sureña tiene asimismo fuerzas policiales y ahora es sede de una de las unidades regionales de la provincia, como en otro orden, hace pocos años se instaló Gendarmería Nacional. Educación y salud La vida educativa también comenzó con el pueblo, al habilitarse una sala para dar clase a hijos de militares y de indios, cuando Florencio Leiva se convirtió en el primer maestro que tuvo La Pampa. El 2-11-1883 se creó la actual Escuela Nº11, dirigida por Maria A. de Bouvíer y Leopoldo Bouvier. La angustia por la falta de edificio la vivió muchas décadas, en que funcionó en casas particulares y hasta en cuatro lugares a la vez, como en las tan modestas pero recordadas casillas de fibrocemento. Finalmente, el 29-3-1948 se habilitó el edificio propio. En distintas épocas se agregaron las escuelas Nº 145 y Nº255 (actual Nº164) que siguen en actividad y también existieron la Hogar Nº5, Nº19 del Valle Argentino y Monotécnica. Del mismo modo, en la actualidad funcionan la Escuela para Adultos, creada hace algo más de 40 años, y de creación más reciente, las escuelas Nº177, Nº245, Especial Nº8, Laboral Nº1,JIN 11 y Centro de Apoyo Escolar y 257 Normal. Dentro del área comunal, en tiempos de territorio había escuelas en Colonia Allende y Utracán,donde ahora se encuentra la Escuela Hogar Nº73. En el paraje Buodo se suma la Escuela Nº223. Fue prolongada en General Acha la espera de un colegio secundario, concretado en 1953 con el Instituto Campos, cuyo primer titular fue Manuel Aparicio. El 18-9-1959 alcanzó jerarquía de Colegio Nacional, con José J. L. Odasso corno rector. El edificio propio lo tuvo en 1978. Además, ahora hay escuelas Normal y Técnica. Ultimamente se agregó la carrera de técnico en producción lechera, en el ámbito de la Facultad de Agronomía de la Universidad Nacional de La Pampa. En 1946 surgió el gremialismo docente, que en La Pampa tenía aún pocos antecedentes. En 1901 se incorporó ala vida de General Acha el Hospital Santo Tomas, sucedido en 1 960 por el actual, que lleva el nombre de Padre Angel E. Buodo.También la ciudad es sede de una de las zonas sanitarias de la provincia. La vía y las rutas En los primeros años, el medio de transporte era la galera. Una noticia de Capital Federal a General Acha o viceversa, tardaba tres o cuatro días en llegar. El 23-7-1896 vino el tren, al inaugurarse el tramo Epu Pel, Unanue, Gamay, General Acha. Incluso existía un proyecto de unir, por ese medio, las capitales de La Pampa y Neuquén, en ese entonces Acha y Chos Malal. La llegada de las vías a General Acha formó parte de la construcción de la red ferroviaria más antigua que pisó La Pampa, que cubrió paulatinamente sus tramos en estas fechas: 29-1-01 hasta Bernasconi 24-7-91 hasta Hucal 31-7-91 hasta Epu Pel 23-7-96 hasta General Acha 21-10-96hasta Utracán 30-6-97 hasta Naicó 20-7-97 hasta Toay Las vías Bahía Blanca-Toay, desde 1901 fueron del Ferrocarril Pacífico, desde 1924 del Ferrocarril Sud y a partir de 1948, del Ferrocarril Roca. En la época inicial hubo también una mensajería General Acha, Bahía Blanca. Al asfaltarse tramos cercanos de las rutas Nº35 y Nº152, en las décadas del '40 y '50 avanzó especialmente la comunicación por ruta. La actual entrada principal de General Acha se ubica sobre la Nº152 que desde El Carancho se dirige hacia el Sur, camino a las sierras de Lihuel Calel. En General Acha, la pavimentación que a partir de 1960 se hizo en el radio céntrico, reemplazó al antiguo empedrado. Vinculado a la comunicación, en 1943 se inauguró el aeródromo. Instituciones y servicios Respecto de las instituciones, en la primera época se fundaron primero la Asociación Española y luego, la Italiana. En 1922, la Biblioteca "Florentino Ameghino". En 1927, el Club Social. En materia social, más adelante se crearon un Hogar de Ancianos y una Residencia Estudiantil de Mujeres. Hace mas de medio siglo, de la fusión de varias entidades surgió el Club Unión Deportiva Campos. Lo formaron ¡os clubes Atlético Independiente, Lawn Tennís, Automóvil Club, Manuel J. Campos y Juventud Unida. Cada uno en su momento, se agregaron los clubes Sportrnan, Campamento Vial, Chacarita, Larnaburu, Centro Rincón Vasco, como también Club Hípico, Auto Moto Club y Club de Caza y Tiro. En 1905 ya había servicio de agua potable, con una torre de Obras Sanitarias. Desde 1920. por medio de empresas privadas se hizo lo propio con la energía eléctrica, lo que en 1956 pasó a manos municipales y desde 1960 es aportado por la Cooperativa de Servicios Públicos de General Acha (CO.SE.GA.). La ciudad también tiene gas domiciliario. Sucesos deportivos Como hecho lejano quedó en el recuerdo el título de campeón de la Liga Cultural de Fútbol que logró Campos frente a formaciones de Santa Rosa, Toay y Riglos. La vuelta olímpica la dio el 23-11 - 1941, el mismo día en que todo el país se conmovió ante la muerte trágica de la aviadora Carola Lorenzini, que por lazos familiares y amistosas estuvo vinculada a algunas comunidades pampeanas, entre ellas General Acha. Esta ciudad, por un lado, vivió la euforia de un éxito deportivo. Por otro, compartió el tremendo impacto ante aquella noticia. A principios de siglo, entre otras manifestaciones deportivas, estuvieron las carreras de sulkys alrededor de la laguna. El ciclismo tuvo enorme atracción en la zona y hubo afluencia masiva a los festivales en el parque municipal, en tanto que el automovilismo cantó, antes de 1940, con animadores del turismo de carretera. Martiniano Resines, Sergio Lana, Francisco Sabaidini. Mucho después adquirió resonancia nacional en Fuerza Limitada con Humberto y Abel Thomas y Onofre López. A su vez en atletismo, su valor más descollante fue Juan Carlos Lavand. Nombres que perduran... Entre las personalidades del pueblo, pueden nombrarse Angel Barni, médico prototipo del desinterés al servicio de la salud. Martín Larraburu, muchos años intendente. Manuel Vega, casi permanente juez de paz. Alfredo Gubitosi, de larga actuación pública. Manuel Silva, unos sesenta años continuados como farmacéutico y en distintas inquietudes comunitarias. En la docencia, reunieron prestigio, entre otros, Mariano Pascual, Petronila Bianchi, Modesta Matorras de Sánchez, Gregorio Meseíman, Reinaldo Emilio Prandi, Emilio Abelleyra, Cesáreo Gómez, Elisa Ortíz de Marc, Segundo Hansen, varios de los cuales se distinguieron como escritores y participantes en iniciativas en el medio. Cabe agregar a María Luisa Ratto de Castells, fundadora y directora de la Escuela N0 145, y Juan Cairo, que dirigió la N0 255, tan identificados con esos colegios, que por muchos años se los mencionó como "la escuela de Castells» y "la escuela de Garro". En el Norte pampeano hubo otra también conocida como "escuela de Garro". General Acha es reflejada en prosas y versos, como la profundización histórica de Andrés Nevares, la investigación de Abraham Salim, el trabajo literario-musical de Anita Carmen Gentile. De allí surgieron el indigenista Leopoldo Laffeullade, el escritor Tomás Niceto De Pablas, el compositor Argentino Valle, los plásticos An-drés Arcuri, Griselda Ferreyra De Arcuri puede comentarse una nota llamativa, antes de comenzar su trayectoria, cuando una publicación achense lo menciona como figura prometedora de la guitarra. También se radicó un tiempo en la ciudad y se allegó a ella, el investigador y escritor pampeano Ovidio Pracilio. Desde hace mucho tiempo hubo en General Acha expresiones de teatro. El cine cantó con salas como Astral, Belgrano, Rex, y es de antigua formación la Banda del Colegio Salesiano. En General Acha se fundó el primer periódico pampeano, "El Obrero de La Pampa". Años después se creó el diario "La Capital", luego trasladado a Santa Rosa. Entre las muchas publicaciones, algunas provinieron de las escuelas. El periodismo actual tiene Canal 2 y su revista mensual. Además, hay una emisora de frecuencia modulada. Mucho tiempo atrás, iniciaron su actividad las propaladoras. El campo, las empresas La producción del campo es eminentemente ganadera, traducida en entidades de distinto orden, como la Cooperativa Agropecuaria y la Asociación Rural, como en celebraciones a nivel provincial: la Fiesta de la Lana, de alrededor de un cuarto de siglo atrás. y la Fiesta del Ternero, que anualmente lleva a cabo el Centro Rincón Vasco. En el plano comercial, en 1885 se fundó Casa Bella Vista, continuada como Ruiz Pérez y Cia, que en una publicación de 1945 registró datos y referencias que enmarcan la era fundacional del pueblo. La vida empresarial y el desarrollo de distintos oficios tuvieron ya en los primeros tiempos muchos protagonistas. En 1915 nació Casa La Moderna. que con Otero Hermanos y Cia. de 1934 al 51 saco a luz Revista La Moderna. Ruiz Pérez y La Moderno alcanzaron gran magnitud entre las casas de ramos generales en La Pampa. Entre las actividades industriales, ahora se encuentran la fábrica de yeso. frigorífico y aserradero. Recuerdos de nieve y lluvia Hubo hitos climáticos, como la nieve del 25-8-1948 y especialmente la lluvia del 3-12- 1951, recordada en particular últimamente ante el problema de las inundaciones. De la nieve del '48, "La Moderna" dice que "...el Sur de La Pampa se cubrió de blancura, a raíz de la gran nevada que cayó, en forma tal, como no se conocía desde veinticinco años atrás". De aquella lluvia, se cantó que iban 100 milímetros, hasta las zonas altas parecían un mar y la precipitación no cesaba. En la mismo revista se lee sobre un "fenómeno pocas veces visto" y que "aproximadamente a las 14 horas y después de un día de viento y tierra, el cielo comenzó a encapotarse en tal forma que a los pocos momentos la oscuridad fue total y que no hubo desgracias personales, aunque sí daños materiales. Misiones religiosas El culto católico tuvo su inserción ya en la etapa inicial y más tarde se radicó en General Acha, Angel Buodo (1867-1947), de origen italiano, cuyo apostolado, en tren o en sulky, es reconocido en el vasto Sur pampeano, en ayuda también a familias socio-eçonórnicamente postergadas. De paseos y estatuas El 20-6-1947, en la plaza homónima, se inau-quró ei monumento a Belgrano. Cuatro años des-pucs se hizo lo propio con el de San Martin, en la plazoleta ubicada frente a la estación ferroviaria y la plazoleta Rivadavia, vecina de la comisaria, tiene también su estatua respectiva. Es histórico el monolito de la intersección de Campos y San Martín, como décadas antes lo eran as cuatro garitas de esquinas céntricas. En otro lugar de la ciudad está el Parque Campos, en terrenos que donO el fundador, instalaciones conocidas como "la quinta del general", expresión que se simplificó hasta llamárseie sola-mente "la quinta general". El balneario de Utracán La responsabilidad municipal alcanza el área de Utracán. Su estación destacó un crecido em-barque ganadero. A su laguna "La Ernestina", a su vez, ya en 1941 se le reconocían propiedades curativas. Actualmente, Utracán se menciona especial-mente por su balneario, pero décadas atrás tuvo buen desarrollo como localidad. Aparte del movi-miento de cargas sumO servicios de telégrafo y correo y gran acopio de cereales, lana, cuero y sobre todo, leña. Fueron tradicionales familias como Alvarez Learte, Vigorito, CulIa y otras. Sobre la denominación "Utracán", entre los datos de Eliseo Tello surge "utra", "frío", y "can", "comida", vale decir "comida fría", mientras Enrique Stieben realiza una serie de consideraciones, entre ellas "pararse, enderezarse, parado, empinado", como también maneja la versión "barrancas a pique", que se acerca a otra definición que suele atribuírsele, "valle de pendiente muy pronunciada". Variaciones demográficas En materia de pobladores urbanos, en 1895 General Acha tenía 883; en 1914 llegó a 3.266; si se toma 1947, la cantidad es 4.709. El crecimiento quedó relativamente estancado, hasta que en 1991 repuntó y señaló 10.119 habitantes, que sumados a los 925 rurales, permitieron un total de 11.044. Respecto de todo el departamento Utracán, ya en tiempos del territorio superó los 10 mil pobladores. Luego hubo un descenso sensible en los campos, pero el ascenso urbano de General Acha hizo que el total no sufriera mermas mayores. El relevamiento último ofreció, en total, 12.967.
|
« | volver |